miércoles, 26 de julio de 2023

Regreso de Rumania por Hungría, Croacia e Italia


"Ve el mundo. Es más fantástico que cualquier sueño." Ray Bradbury

Salimos de Rumania con pena de tener que abandonar este país tan bonito como acogedor, pero con la esperanza de volver.

Nos hemos despedido de un país hospitalario, con gente super amable y dispuesta a ayudar, paisajes brutales y carreteras moteras y entramos en Hungría, no se bien si fue por llevar las expectativas tan altas después de Rumania o porque realmente nos toco una zona más que fea aburrida de este país, pero se nos estaba haciendo el día muy cuesta arriba.


No encontramos ni una pequeña curva ni siquiera cuando nos salíamos de la red principal de carreteras y cogíamos locales o comarcales. Tedio y aburrimiento, mucho trafico, velocidades imposibles y calor, mucho calor.

Tras pasar por Debrecen y Pecs, decidimos, no se si acertadamente o no, alterar la ruta inicial que era parar en Seged y cruzar a Croacia por la ya cercana Barcs, tras más de setecientos km, mucho calor y casi once horas de moto, solo parando a repostar unas veces Beltzi y otras nosotros, atravesamos la frontera.

Todo mejoro en cuanto pasamos a Croacia, bosques verdes, temperatura aceptable, bonita y alegre carretera sin apenas trafico. Con todo esto cuando llegamos a Kutina nos pareció un lugar agradable para parar. 

Es un bonito pueblo donde además de la zona nueva han conservado un pequeño barrio con las casas tradicionales de madera, el molino y diversas construcciones muy curiosas.


Dimos un paseo para estirar las piernas y al parar a refrescarnos en una terraza nos echamos un curioso amigo que quería compartir con nosotros la cerveza.

Kutina tiene, además, un bonito parque de castaños y se encuentra dentro de la ruta del vino de Moslavia, por lo que se hizo imprescindible probarlo con la cena.

Bueno acabamos la jornada mucho mejor de lo que preveíamos al inicio, asique nos fuimos a la cama bastante complacidos y esperando que la siguiente jornada que nos iba a llevar hasta Split, donde cogeríamos el ferry de vuelta a Italia fuese por lo menos un poco más amena en cuanto a carreteras se refiere.

Así fue, las carreteras croatas, se nos hicieron más amenas, cruzando por parques naturales donde la frondosidad de sus arboles nos hacían la ruta mucho más fresca y divertida.

Cuando nos acercábamos a los Lagos de Plitvice, que no íbamos a poder visitar en esta ocasión por tiempo e infraestructura, ya que esta no era la ruta original, descubrimos otro pueblo de maravillosas cascadas e impresionantes postales en todos su rincones: Rastoke. 


Desde la carretera mismo vimos las cascadas. Y es que desde los diversos parkings se tienen unas maravillosas vistas del conjunto del pueblo. 

No podíamos dejar de parar, ya que la visita completa no lleva más de una o dos horas, y además nos venia bien una parada.

Esta considerado monumento cultural de Croacia. Fue bastante destruido en la Guerra de los Balcanes pero ha sido reconstruido para poder verlo como lo hacemos ahora. Porque además de las bellísimas cascadas y lagos, sus casas tradicionales construidas en piedra y madera con tejados de pizarra y asentadas sobre pilares de piedra que las aíslan del agua.

Existen además molinos de mas de trescientos años de antigüedad  que usan la fuerza del agua para moler ya que este pequeño pueblo se encuentra en la unión de los ríos Slunjcica y Korona, de ahí también las numerosas cascadas.

Encontrar este pueblecito en nuestra ruta fue otra de las muchas agradables sorpresas que este viaje nos tenia reservadas.

La ruta de hoy eran casi cuatrocientos kilómetros, asique tuvimos que parar a almorzar, y encontramos un sitio fabuloso en un recodo del rio Krka, a las afueras de Knin. Lo cierto es que en este país hay lugares fabulosos en cualquier esquina para hacer un refrescante picnic.

Nuestra ultima parada en Croacia iba a ser Split, decidimos llegar con tiempo para hacer una visita en profundidad, ya que el lugar lo merece.

El lugar que Diocleciano eligió para hacerse un palacete donde descansar en su retiro, es hoy el corazón de esta ciudad.


Y es que el Palacio es toda una ciudad en su interior, rodeado de murallas y con cuatro puertas principales a cada una mas bonita. 

La puerta Ferrea junto a la torre de Nuestra Señora del Campanario y que nos conduce al patio donde se celebraban las ceremonias oficiales. La Puerta Aurea, que era la principal y por tanto la más majestuosa. La Puerta Platea que se parece mucho a la Aurea pero más humilde y nos lleva derechos al Mercado. La Puerta de Laton, al Sur y que conecta el palacio con el paseo marítimo.

El Peristilo era y sigue siendo el corazón de esta pequeña ciudad dentro de las murallas. Las actuaciones de todo tipo de artistas tienen  aquí al aire libre un espectacular escenario, con la multitud sentada en las impresionantes escaleras.

La Catedral de San Domnius, que antiguamente fue el mausoleo de Diocleciano, el ultimo emperador que persiguió a los cristianos, se convirtió después de su muerte en lugar de culto de los perseguidos. Cosas de la vida que da muchas vueltas.

Los subterráneos estupendamente conservados y hoy convertidos en curiosas galerías de arte. 

Pasear a la sombra por estrechas callejuelas, la vida que no para dentro de este lugar, todo lo convierte en un escenario perfecto para series como Juego de Tronos. Un lugar estupendo para dejar volar tu imaginación.

Preciosa puesta de sol desde el ferry y por la mañana ya estaríamos en Italia, y por tanto mas cerca del final de este maravilloso viaje.

Teníamos todo el día para cruzar hasta Chivitaveccia donde cogeríamos el otro ferry, así que tranquilidad total conociendo lugares que nos pillaban de paso.

Perugia es una parada imprescindible, todo esta cerca y su casco histórico es muy bonito y esta muy bien conservado.

En la capital de Umbría el corazón neurálgico es La Piazza IV noviembre, antiguamente era el punto de salida de las cinco vías reales allí existentes.

En el centro de la plaza esta el símbolo de la ciudad la Fontana Maggiore una obra maestra del s. XIII. Estatuas y relieves de ninfas, los signos del zodiaco, las labores del calendario agrícola, santos, figuras mitológicas,... es un gustazo observar tal profusión de esculturas y buscar su significado.

Al lado de la fuente hay una alcantarilla que es un pozo medieval a 47 metros de profundidad, para no quedarse sin agua en los posibles ataques enemigos.

La catedral de San Lorenzo con su fachada inacabada esconde en su interior bonitas obras de arte, entre la que destaca el coro de madera tallada, que ahora esta algo dañado por un incendio en la época de los ochenta.

Presidiendo la plaza el Palazzo del Priori, un bello edificio del s. XIII con bellísimos relieves. Llama mucho la atención la gran escalinata pero esta es un añadido de principios del s. XX, el tesoro esta en su interior, con frescos originales de su construcción y bonitas sillerías de madera del s. XIV.

En los bajos del palacio esta la sede desde 1390 de los mercaderes de Perugia donde se conservan los murales de la sala de Audiencias.

El oratorio de San Bernardino, la basílica de San Doménico, la Abadía de San Pedro, la capilla de San Severo son algunas de sus muchas iglesias visitables. 

Un riquísimo café italiano, con un dulce, todo acompañado de una estupenda banda sonora de jazz, ya que se celebraba un festival, fue el colofón para comenzar la mañana divinamente.

Continuamos hasta Todi, preciosa ciudad medieval de calles estrechas y tortuosas.

La ciudad esta encerrada entre dos murallas una de origen romano y otra medieval. El corazón del casco histórico es la Plaza del pueblo.


Donde destaca el Palacio del Popolo, que es uno de los edificios públicos mas antiguos de Italia. Aquí también había un festival musical, se conoce que el verano anima.

La catedral o el duomo se halla también en esta plaza.

Diversos palacios rodean la bella plaza y por debajo, un sistema de cisternas romanas que en algunas partes se pueden visitar. 

Y como en toda ciudad italiana numerosas y enormes iglesias. El templo de Santa María diseñado por Borromini merece la pena una corta visita, ya que es mucho más impresionante su exterior que su interior.

Continuamos paralelos al rio Tevere hasta el lago Corbara donde la temperatura comenzó a ser un infierno. 

Un trozo de pizza y una Peroni bien fría fue un estupendo almuerzo.


De allí hasta Chivitaveccia donde nos refrescamos y dimos un paseo por al lado del mar viendo los múltiples puestos artesanos que se concentran en las tardes de verano.

Acabamos nuestra estancia en Italia en la Taberna del Puerto, mi sitio favorito en Chivitaveccia,  donde un plato de estupenda pasta nos hizo la espera del ferry más llevadera.

Y 6226 km después volvimos para casa, con una pocas palabras en rumano, decenas de anécdotas, cientos de colores que recordar y miles de imágenes imposibles de olvidar.

Gracias a mi motero favorito por hacer que este viaje haya sido magnifico. 








martes, 25 de julio de 2023

RUMBO A RUMANIA: Italia, Croacia, Bosnia-Hercegobina y Serbia


"VIAJAMOS PARA CAMBIAR NO DE LUGAR SINO DE IDEAS"



En este viaje así había sido, llevábamos ideas preconcebidas de países que luego nos han mostrado su verdadera cara. Ha sido un viaje muy revelador y muy positivo.

Habíamos planificado el viaje a Rumania cogiendo ferris para ahorrar unos cuantos kilómetros y a la vez descansar un poco durante los días de trayecto.

Salimos pronto de casa y hasta llegar a Barcelona teníamos muchas horas por delante, hacia un día estupendo y recorrimos tierras oscenses pasando por el bello pantano de Yesa.

Nos desviamos un poco de la ruta planeada cuando vimos señalizado el castillo de Loarre, nunca habíamos parado a visitarlo, hoy que hacia un buen día y no dependíamos más que de nosotros mismos y del ferry a última hora de la tarde, era el momento.

El castillo es un precioso monumento bastante bien conservado pero el excesivo calor que hacía nos hizo acortar bastante la visita.


Continuamos por el interior de Huesca hasta Cataluña donde paramos a comer y a refugiarnos, con ayuda del aire acondicionado del restaurante, del agobiante calor. 

Iríamos Barcelona- Chivitaveccia, cruzaríamos Italia hasta el Adriático y allí cogeríamos otro ferry hasta Croacia. Valorando fechas y disponibilidad tendríamos que quedarnos dos noches en Italia. Aprovechamos esta tesitura para conocer la ciudad eterna, por donde tantas veces hemos pasado, pero nunca visitado a fondo y decidimos alojarnos cerca.

Concertamos varias visitas guiadas para conocer lo mejor de Roma. El Coliseo, la columna de Trajano, la piazza Navona, el Partenón, el Moisés de Miguel Ángel, el Foro Romano, tantas cosas y tanta gente.



La fontana de Trevi, la Plaza de España y callejear por sus calles, gente de todas las nacionalidades inmersas entre siglos de historia, de tiendas, de cultura y de sorpresas.



El bonito barrio del Trastevere, callejear por sus hermosas y atestadas calles, descubrir antiguos palacios, ricas trattorias y bohemios rincones. Lo ideal es dejarse abandonar en su encantador ambiente.

A pesar del calor y del gentío disfrutamos enormemente del día. Antes de ir al apartamento hicimos una rápida visita el Vaticano, no podríamos ver los museos, pero no nos queríamos perder por lo menos un vistazo a la Plaza, ya a esas horas casi vacía.

Al día siguiente no quisimos volver a Roma debido al calor, así que teníamos toda la jornada para turistear camino de Ancona, ya que el ferry no salía hacia Splitz hasta última hora de la tarde. 

Nos habíamos alojado en Cerveteri, un bonito y tranquilo pueblo en las afueras de Roma, de allí cruzamos el parque Natural de Bracciano-Martignano, pasamos Vetralla y por la SS2, a la sombra del arbolado llegamos a Virtebo, el centro de la ciudad es medieval y su estado de conservación es de los mejores  del mundo, dicen. Sus orígenes se remontan a los etruscosy posteriormente fue amurallada en el año 773, el casco histórico es un entramado de callejuelas y plazas que sin ninguna duda hay disfrutar con un buen paseo.

El Palacio del Papa es así conocido por ser residencia de campo y refugio de los pontifices durante muchos años. Después de una agitada historia papal, se convirtió en capital de provincia, a posteriori fue bombardeada en la II Guerra Mundial y quedo prácticamente destruida. Hoy ha recuperado su esplendor y es un placer disfrutar de sus callejuelas y sus plazas.

Desde la Loggia delle Bendizione los pontífices realizaban sus primeras bendiciones y saludos ya que allí se eligieron a muchos de ellos.

Las preciosas columnas que allí podemos ver son de templos romanos anteriores confiscadas por la iglesia.

La catedral de San Lorenzo es el segundo edificio más importante de Viterbo y el principal lugar de culto. Aunque su estructura es románica ha sido reconstruido en varias ocasiones, pero aún así conserva todo su atractivo. Entre otras curiosidades que se pueden encontrar allí destacar el busto de Cristina Leticia Bonaparte y la tumba del Papa Juan XXI.

Pero lo mejor de Viterbo es pasear por sus callejuelas empedradas e ir de plaza en plaza deleitándose contemplando los bellos palacios que plagan sus calles, las innumerables iglesias y todas las casonas señoriales.

 La plaza de San Pelegrino es un pequeño espacio medieval y pintoresco.


La Plaza de la Fontana Grande alberga la fuente más antigua de Viterbo de estilo gótico. 

Un lujo pasear temprano por sus calles sin la algarabía de turistas que suele haber al mediodía. En una pequeña iglesia un feligrés muy amable nos explicó el "milagro" del Papa que te sigue con los ojos allí donde te pongas para contemplarlo. Es una técnica pictórica que no todos los artistas dominan pero que es más común de lo que creemos..

Después de disfrutar de los variados y preciosos palacios que inundan sus calles, abandonamos Viterbo y nos adentramos en plena naturaleza italiana, cruzamos Terni, para ir hasta Spoleto.

El calor ya apretaba cuando desde lejos vimos la imponente Rocca Albornoziana. En lo alto de la colina de Sant´Elia se alza la imponente fortaleza.

Spoleto es una de las ciudades más antiguas de Italia, su historia se remonta a hace más de 2500 años cuando fue fundada por los Hunos. Después fue ciudad romana, lombarda y medieval. Se aprecia por toda la ciudad la fusión del arte barroco, románico y renacentista.

Aparcamos la moto en el centro, justo al lado de los restos del Teatro Romano. Son unos restos del s. I donde tenían cabida más de 2000 espectadores. El Museo Arqueológico se encuentra justo al lado.

Paseamos por el pueblo y fuimos a dar a La Catedral de Santa Maria Assunta del s. XII es el símbolo de la ciudad y una maravilla arquitectónica. La fachada románica se alza esplendida al final de la bella plaza.

Es cierto que pasees por donde sea vas a ir a dar a esta bellísima plaza, y menos mal, porque es un sitio que no te puedes perder. 

Numerosas iglesias jalonan nuestro paseo, la iglesia de San Salvatore, Patrimonio Mundial de la Unesco, la basílica de San Pietro, la de San Ponciano.

Todas sus callejuelas empedradas y coquetas evocan tiempos medievales. Además, como son estrechas, da la sombra y es un lujo poder pasear.

Como tampoco te puedes perder, el paseo por lo alto de Sant´Eliza donde se alza la Rocca. Esta se construyó en el s.XIV por orden del cardenal español Egidio Albornoz, de ahí su curioso nombre. El castillo de planta rectangular este defendido por seis imponentes torres. Fue en su día residencia de los papas en sus numerosos viajes, luego prisión y hoy lugar de celebraciones y eventos.

Las vistas desde el paseo son de 360 grados sobre Spoletto.

 En lo alto de la colina abundan las mesas de picnic, sombra y jardines, y ya se sabe, cuándo el hambre aprieta no hay mejor cosa que un buen picoteo, en este comedor tan especial, lo mejor fueron las vistas. Y como no, un poco de cecina de León, sin ninguna duda.

          

De allí nos metimos dirección a la sierra y después de rodear un pequeño lago, el de Cingoli, y curvear todo lo que quisimos llegamos a Ancona.

Aunque habíamos estado varias veces en Ancona y visitado la ciudad en su zona baja, nunca nos habíamos desplazado hasta la zona más alta y disfrutar de la catedral de San Ciriaco.

Su escalinata, los leones y su fachada puntiaguda son el símbolo de la ciudad y se alza orgullosa donde se erguía el templo romano dedicado a Venus, dominando poderosa todo el puerto y el mar.

Nos dirigimos a coger el ferry y después de contemplar en cubierta la bella puesta de sol, nos fuimos a descansar, la llegada a Split estaba prevista hacia las siete y media de la mañana y, como ya sabéis los que habéis cogido ferris, te levantan con bastante antelación.

Bajar del ferry y pasar el control aduanero nos llevó apenas una hora, asique para las ocho y pico estábamos desayunando en los numerosos locales que hay a las afueras del puerto y a las puertas del Palacio de Diocleciano, que no es sino una fortaleza con una ciudad al completo en su interior.

Como era muy pronto estaba casi todo cerrado, asique para aprovechar el día decidimos dejar la visita turística para la vuelta y continuar la ruta en dirección a Bosnia. Nos adentramos en este país tan especial por carreteras que discurrían entre bosques frondosos.

Este país balcánico ha sabido renacer de sus cenizas, las continuas guerras, la última no muy lejana en el tiempo, dejo ciudades destruidas y miles de víctimas inocentes. Los recuerdos a este pasado militar están a cada paso.


Mostar, está considerada la capital de Herzegovina, esta ciudad mantiene la influencia otomana en su arquitectura con numerosas mezquitas de las que sobresalen esbeltos minaretes.

Aparcamos en la puerta de un chiringuito de madera, muy bien decorado, por cierto, nos lo aconsejo un chico que se encontraba en la entrada del parquing público, allí por una módica cantidad nos vigilaban la moto y nos cuidaban chaquetas y resto de ropa que quisiéramos dejar para poder pasear cómodamente por el casco antiguo de Mostar. Eso sí, no teníamos moneda local, nos confiamos pensando que aceptaban euros y en algunos sitios no era así. Resuelto el problema monetario, disfrutamos mucho de esta bonita y curiosa ciudad. 

Nos adentramos en la zona peatonal del casco antiguo por unas calles estrechas de estilo medieval plagadas de gente, tiendas y rincones con mucho encanto. La calle Onescukova es una de las más bonitas y uno de los ejes comerciales del casco antiguo. 


El lugar más emblemático y también el más turístico es el Puente Viejo o Stari Most, fue el símbolo de la buena convivencia entre católicos y musulmanes durante siglos hasta que en la Guerra de Bosnia fue bombardeado el 9 de noviembre de 1993. A posteriori la UNESCO dirigió las obras de reconstrucción y en 2004 se reinauguro, tiene una altura de veinte metros y los jóvenes locales nos ofrecen un espectáculo saltando desde lo alto al rio Neretva.


El rio Neretva es el eje de la ciudad, hay incluso una playa urbana, donde hay una escuela de surf. Increíble, no?


Después de cruzar el puente llegamos a la calle Kujundziluk, esta calle empedrada alberga el antiguo bazar.

Rodeada de casas de piedra pintadas en colores pastel es una de las más bonitas, hoy, plagada de turistas solo pudimos fotografiar las pequeñas callejuelas adyacentes. 

A lo largo de esta calle nos encontramos en numerosos e insólitos rincones pintada la frase "Don´t Forget" para que no nos olvidemos del trágico desenlace de la guerra de Bosnia.

 

Paseando llegamos a la mezquita Koski Mehmed Pash, está situada al borde del acantilado del rio Neretva y es una joya de la arquitectura otomana en la Bosnia- Herzegovina. 

Construida en 1618 conserva la decoración original en su interior, con una bella alfombra, vidrieras de colores y bellas pinturas.

Pagar tres euros merece la pena por entrar a su interior y subir al alto minarete para disfrutar de las mejores vistas de la parte antigua de la ciudad.

A lo largo del rio hay numerosos puentes, también en sus pequeños afluentes. El más curioso es el que llaman el Puente Torcido o Kriva Cruprija, es una versión en pequeño del Stari Most, construido en 1558 se cree que como prueba para la posterior construcción del Puente Viejo.

Tras una estupenda experiencia en esta icónica ciudad, nos dirigimos hacia Sarajevo, donde hoy habíamos decidido dormir. Nuestra ruta nos llevaba por el cañón del rio Neretva, siguiendo la carretera M16.2.

Este rio, dicen, es el más frio del mundo. Nace en los Alpes Dináricos y desemboca en el Adriático, muy cerca de Dubronick. Tiene unos 225km de recorrido de los cuales 205 discurren por Bosnia, cruzando el país. Sus aguas de un bello color esmeralda, nos deja unas capturas muy bellas y nos permite disfrutar de unos paisajes increíbles. 

Dada la belleza de la ruta hay restaurantes, miradores y lugares donde hacer senderismo por todas las esquinas. 

Este bello país ha sido un descubrimiento para nosotros, no lo imaginábamos así.

Seguimos hasta el lago Jablanica, cerca de la ciudad con el mismo nombre. Es un gran embalse creado para acumular el agua del rio y satisfacer a las tres presas hidroeléctricas cercanas. 

 Por la M17 rodeando el lago, dejamos atrás Konjic y de allí nos dirigimos a Sarajevo.

La capital de este país está situada en el fondo de un valle rodeada de los Alpes Dináricos y en torno al rio Miljacka. Siempre fue un ejemplo de convivencia de las distintas religiones hasta la guerra de Bosnia. Entre 1992 y 1995 fue asediada y bombardeada en innumerables ocasiones, todos esos ataques provocaron más de 12000 muertes, en su mayoría civiles. 

La Galería 11/07/95 que pudimos visitar es un espacio con películas, carteles, imágenes y testimonios sobre la tragedia de Srebrenica y toda la guerra que sufrieron.  

Entramos en la ciudad viendo todavía los agujeros de los disparos en los enormes edificios de estilo soviético que se levantan a lo largo de la larga avenida que nos lleva hasta la zona del casco histórico.

Paramos cerca del Ayuntamiento para situarnos y localizar el alojamiento, en el cual, al final no nos quedamos ya que no cumplía con lo ofertado. Dimos mil vueltas por un barrio al otro lado del rio que parecía un laberinto de casas bajas y calles sucias. No nos gustó nada la zona, el alojamiento no tenía parquing, que en la app si decía tener.  Uno a uno nos recorrimos los hoteles que había en el casco histórico, allí el rooming no funciona y hoy en día sin conexión te sientes desvalido. Estaban completos en su mayoría, pero al final dimos con uno que tenía habitación, tampoco tenía parquing pero en la entrada tenía una pequeña zona cubierta donde nos dejaron colocar la moto y menos mal porque, aunque hizo estupendo todo el día, por la noche hubo tormenta y si no Beltxi se nos hubiera mojado. Este fue el único inconveniente que tuvimos a lo largo de todo el viaje, y con suerte lo resolvimos favorablemente.

Dimos nuestro recorrido turístico por el centro histórico casi de noche porque, aunque no era tarde, allí anochece mucho antes que en España.

El Ayuntamiento es un edificio que llama la atención por su colorido morisco español, los detalles arabescos nos recuerdan diversos edificios del sur de nuestro país, construido en 1896 fue totalmente destruido en la guerra y hoy luce elegante y nuevo después de su reconstrucción.

Cerca del Ayuntamiento se entra en el barrio turco de la ciudad, Bascarsija. La arquitectura otomana con esbeltos minaretes, mercados, bazares, tiendas repletas de souvenirs, pastelerías con coloridos escaparates y las llamadas a rezar desde las numerosas mezquitas nos transporta a otros escenarios.

En la Plaza de la Paloma, hay un montón de estas aves en ella, es el centro neurálgico de este barrio y se encuentra la bonita fuente Sebilj, de madera y piedra, de mitad del s.XVIII , en ella hay que beber si quieres volver algún día a esta curiosa ciudad. Las terrazas repletas, los niños comiendo helados y gente tomando el fresco que ya a esa hora comenzaba a hacer, nos muestra una ciudad llena de vida.

La Mezquita de Bascarsija en la plaza principal del antiguo centro, muestra orgullosa su bonito pórtico abierto con tres arcos y su minarete de piedra elevándose al cielo. Esta mezquita fue construida originalmente en el siglo XVI con una cúpula de madera, tras sufrir un montón de daños en la guerra se ha reconstruido en piedra. 

Muy cerca esta la mezquita de Gazi Husrev-beg, la más monumental de Bosnia.

Esta mezquita fue construida en el s. XVI y destaca por sus múltiples cupulas y su portal decorado con mocárabes. 

Aunque no pudimos entrar al interior, creo que era la hora de la oración, merece la pena adentrarte en el patio exterior. Allí puedes ver la fuente de las abluciones con un bello techado de madera y la tumba de Gazi Husrev-Beg.

Seguimos caminando por el casco histórico y pasamos por delante de la Torre del Reloj que marca la hora lunar.

En la peatonal calle Ferhadija se aprecia el cambio de arquitectura de la otomana a la astrohúngara.


En esta calle se encuentran los edificios históricos más importantes de la ciudad como la Catedral del Corazón de Jesús, la catedral ortodoxa de la Natividad, la Galería 11/07/95, el Museo de los Crímenes contra la Humanidad, la Plaza de la liberación y el memorial de la llama eterna en honor a los caídos en la guerra.

La Catedral del Corazón de Jesús es de estilo neogótico, su fachada con dos torres de más de 40 m. de estilo románico impresionan nada más verlas. Es la más grande de todo el país y sede del arzobispado.

La Catedral Ortodoxa de la Natividad se encuentra a pocos metros y es el edificio no musulmán más antiguo de la ciudad. Tiene cinco cupulas y un campanario de 45m.

Justo al lado se encuentra la Galería 11/07/95 de la que ya hemos hablado.

Cruzamos el Puente Latino donde en 1914 se produjo el asesinato del Archiduque de Austria Francisco Fernando y su esposa Sofia, hecho este que desencadeno el comienzo de la I Guerra Mundial. Una placa nos recuerda este importante hecho histórico.

Tras un bonito paseo por la orilla del rio Miljcka volvemos al barrio turco para tomar algo y cenar rodeados de un magnífico y cosmopolita ambiente. Mucha gente joven, de diferentes culturas, pero todas disfrutando de la multiculturalidad de esta maravillosa ciudad.

No podíamos imaginar cuando entramos en esta castigada ciudad la agradable tarde-noche de la que disfrutamos en ella.

Por la noche, como ya comenté anteriormente, hubo una buena tormenta, asiqué a la mañana siguiente, retrasamos un poco la salida debido a la suave pero constante lluvia, al fin tuvimos que ponernos en marcha con el traje de lluvia. 

La primera parte del viaje no fue nada agradable, había mucha niebla y bastante humedad, circulamos paralelos al rio Drina durante bastantes kilómetros, al otro lado estaba Serbia, pero no hay muchos pasos fronterizos.

Serbia es un país de gente amable que intenta abrirse al turismo y por tanto hacer sentir a gusto al viajero, a la vez debido a los diversos conflictos en los que se ha visto inmerso también es muy defensor de sus tradiciones, esta parte del país, un poco más alejada de todo, nos lo demostraba en sus construcciones, sus granjas y los numerosos recordatorios a las guerras que han sufrido.

El asfalto en las vías principales es bueno, pero si te desvías un poco de la red principal, encuentras ripio y baches. En general no nos podemos quejar, aparte de cruzar el país de camino a nuestro destino solo nos alejamos un poco de las principales carreteras para visitar un par de monasterios.

No habíamos comprado tarjeta para el móvil, ni cambiado dinero porque era un país de paso. Con el frio y la humedad nos apetecía muchísimo un café caliente, siempre hay alguien que te entiende y te atiende con mucho gusto. Así que pelados de frio este nos supo a gloria. 

 

Nos adentramos en el Parque Natural Fruska Gora, es un paraje natural con bosques, cascadas y monasterios escondidos entre su frondosa vegetación. Ya el tiempo había cambiado y disfrutamos de una zona maravillosa con un área de lagos, merenderos, rutas para hacer senderismo y los bosques de tilos más grandes de toda Europa.

Dentro del parque natural hay diecisiete monasterios aunque su tamaño nunca es pequeño hasta que no estas casi encima no se ven debido a los altos árboles y las numerosas curvas de la carretera.

Nuestra primera visita fue al monasterio de Jazak. Este monasterio se construyó en el s. XVIII, bajo las órdenes de la emperatriz de Austria, por ello, aunque el monasterio es ortodoxo tiene muchos detalles barrocos.

 El iconostasio es de este estilo. Es colorido, con hojas de oro y plata y realmente es precioso.

            Tiene una bella entrada y está rodeado de unos bellísimos y floridos jardines.

Esta regentado por monjas, que además son muy amables, pero hoy en día a pesar de las dimensiones del recinto habitan en él apenas una docena de religiosas.

La paz y tranquilidad se sienten en todo el complejo. Y te invitan a descansar un rato y parar un poco el ritmo de este viaje.


A continuación, fuimos hacia el Monasterio Krusedol, uno de los más importantes de la zona ya que fue la Sede del Patriarca. Se fundo en 1546. Tiene un rico tesoro y las reliquias de numerosas personas influyentes de la religión y la política otomana.

Es, además, el más llamativo debido a su precioso color rojo. Su puerta principal parece la entrada a un palacio de cuento de hadas.

En el pórtico y en el interior de la Iglesia hay unos bonitos frescos.

Los cuidados e inmensos jardines por lo que está rodeado no difieren en nada con el entorno natural en el que está situado.

Nuestra siguiente parada seria en Sremski Karlovci para visitar el monasterio de Velika Remeta. Este, de estilo barroco fue fundado en el s. XII y tiene el campanario más alto de toda la zona, con 38.6 metros.


     Cruzamos por Sremski Karlorci, aunque es una ciudad con un montón de cosas que ver, no paramos,        íbamos ya justos de tiempo, para que no se nos hiciera de noche por el camino.
      Solo pudimos ver la escuela de Gramática, el edificio más icónico de la ciudad, desde el asiento de          la moto. 
       Además, no era buena hora para visitar nada. Estaba todo cerrado.

Circulando por suaves colinas boscosas junto al Danubio, por fin lo cruzamos por un enorme puente


Tras hacer una breve parada en Novi Sad para hidratarnos aprovechamos a ver alguna de sus numerosas iglesias.

No queríamos retrasarnos mucho más para cruzar pronto la frontera, lo cual hicimos sin mayor          problema y no tardamos mucho en llegar a nuestro primer destino Timisoara.

                               Pero eso lo cuento ya en mi siguiente entrada: Rumanía.








Regreso de Rumania por Hungría, Croacia e Italia

"Ve el mundo. Es más fantástico que cualquier sueño." Ray Bradbury Salimos de Rumania con pena de tener que abandonar este país ta...