"Si tuviera que escapar a algún lugar y esconderme para pasar el resto de mi vida, Asturias seria la elección perfecta" Woody Allen
Con la intención de hacer la ruta del motero ejemplar por la mancomunidad de los Oscos-Eo y la comarca de Navia nos dirigimos a Luarca para hacer noche y estar más estar cerca del comienzo de la ruta.
Teníamos un pasaporte para rellenar con ocho sellos de los pueblos ejemplares de esta zona.
En Asturias todos los años se da el premio del Pueblo Ejemplar a un pueblo que destaque por la defensa de los valores tradicionales y culturales, del entorno natural y por la convivencia y solidaridad de sus vecinos.
El lema del concejo de Valdés es "El mar, el rio y la montaña", su capital Luarca cumple bien con todos esos requisitos.
Apodada la Villa Blanca de la Costa Verde, haciendo alusión a las bellas casas que destacan entre el azul del mar y el verde de sus montes. Es un pueblo pesquero, alrededor del puerto sus pequeñas casas y sus calles asimétricas rodean las embarcaciones de la flota más importante de Asturias.
El rio Negro cruza Luarca de arriba a abajo, de ahí que haya siete puentes a lo largo de él. Entre ellos el llamado del Beso, que tiene su propia leyenda. La hija del señor de la Atalaya se había enamorado de un pirata preso en las mazmorras luarquesas, cuando intentaron huir el noble lleno de ira corto de un tajo con su espada las cabezas de los amantes y donde ahora se halla el puente es hasta donde rodaron sus cabezas fundiéndose en un beso. Ahora sin ser un puente que llame la atención es lugar de muchas fotos y por tanto de muchos besos.
Paseando por sus calles vemos la casa natal del Premio Nobel de Medicina Severo Ochoa y algún que otro monumento y recuerdo a tan ilustre personaje allí nacido y criado.
La bonita fachada del Ayuntamiento de estilo ecléctico del arquitecto Manuel de Busto que construyo tambien el casino y la espectacular mansión indiana Villa Excelsior.
Paseando todas sus calles están llenas de bellas casas modernistas y un poco más alejadas del centro las esplendidas villas indianas.
Una cena a base de productos típicos de la zona y el bello baile de las gaviotas sobre nuestra terraza puso fin a tan buen comienzo de ruta.
A la mañana siguiente llegamos a Puerto de Vega, tras recorrer el pueblo y preguntar a varios de sus vecinos nadie supo decirnos donde se podía sellar el pasaporte. Por fin un motero que nos encontramos nos dijo que en la vecina Navia, en la sidrería Antolín, lugar de reunión de muchos moteros igual nos podían dar razón.
Lo que si hicimos fue una foto en la placa de pueblo ejemplar. Puerto de Vega fue nombrado en 1995. Nuestra visita fue rápida un paseo por su puerto y luego por la parte alta donde se aprecian las bellas casas indianas y bonitos jardines.
Con las mismas nos dirigimos a Navia capital de la comarca. Así que llegamos a la sidrería donde un amable camarero nos dijo que allí mismo nos podía acuñar el pasaporte.
El rio Navia desemboca en esta villa dandole nombre. Toda la vida allí gira alrededor del rio y el mar.
En las proximidades de Navia nos desviamos un poco de la ruta para acercarnos al bonito pueblo de Ortigueira en el municipio de Coaña para ver sus faros.
Y la visita bien vale la pena. Las vistas de la costa desde allí son espectaculares.
Tras muchas generaciones de pescadores dedicados a la captura de la ballena y la langosta se construye el puerto del Ribeiro para aglutinar un poco la flota y las viviendas de los pescadores que a partir de entonces estarían a su alrededor formando el pueblo pesquero de Ortigueira.
En la parte alta del pueblo están todas las magnificas villas indianas mirando al mar y observando desde lo alto al resto del pueblo.
Un paseo nos conduce hasta la preciosa postal que forman los dos faros, uno antiguo y otro moderno, la capilla de San Agustín, del s. XVII, y el monumento a los caídos en el mar.
El faro antiguo de 6m. y construido en 1945 tiene a su lado una campana de aviso.
El faro moderno tiene 20m. y se construyo en 1975.
En estos momentos ante el monumento a los caídos había construida una bella alfombra floral en honor a la Virgen del Carmen, cuya festividad se acababa de celebrar.
Retomamos nuestra ruta y nos dirigimos a Castropol, situada a un lado de la ría de Eo, que es la frontera natural con Galicia. El Puente de los Santos tiene cada uno de sus lados en una comunidad. En la asturiana esta la capilla de San Román y en la gallega la de San Miguel.
El monumento a Pueblo Ejemplar esta situado en la Plaza del Cruzadero, en el centro de la zona antigua y puedo decir después de ver unos cuantos, que es uno de los mas bonitos.
Nombrado pueblo ejemplar en 1997 es un plato en el que están representados todos los motivos por los que Castropol fue nombrado Ejemplar.
La Biblioteca Popular Menéndez Pelayo, una de las mejores bibliotecas publicas desde que se fundo en los años 20. El Club de Mar y Vela por recoger los aspectos fundamentales de la vida marinera. Las alfombras florares del corpus, realizadas por todos los vecinos en las principales calles de la villa. El retablo de la Marquesa y la iglesia parroquial restaurados gracias al apoyo de toda la comunidad. La casa de la cultura. Y lo más bonito todos los vecinos que con su unión y respeto han mantenido y conservado todas las costumbres de la villa.
El sello nos lo colocaron en el complejo Peña Mar y es un sitio que bien merece una visita.
Hay allí una colección de relojes, la mayoría péndulos, y alguno de hace más de 200 años. Tuvimos la suerte de coincidir con el dueño y nos conto un sinfín de curiosidades sobre algunas de las piezas.
Nos adentramos ya hacia el interior por la N-640 cruzando a Lugo y volviendo a Asturias, rodeados de una verde y fresca vegetación.
El siguiente cuño era en San Tirso de Arbes, nos sellaron en La Farrapa, un local a la antigua usanza que en los pueblos te salvaban de cualquier necesidad, venden de todo y además es bar y centro de reunión.
El monumento, un árbol centenario tallado con un pescador, un mallador de trigo y representaciones de la musica,el teatro y los oficios tradicionales.
Por una carretera cada vez mas estrecha rodeados de frondosa naturaleza fuimos subiendo hasta sumergirnos en la niebla.
Cuando salimos de la niebla estábamos en las inmediaciones de Taramundi, bonito pueblo ahora muy turístico, pero que en sus alrededores parece haberse detenido el tiempo. Los tejados de pizarra aparecen diseminados por las verdes praderas y excepto en el pueblo y en la carretera principal el trafico es casi nulo.
Hicimos una breve parada para almorzar, estaba lleno de gente ya que se ha convertido en un referente del turismo rural asturiano. Recomiendo una buena visita a su fabrica de navajas y a Os Texois y Mazonovo. Nuestra anterior visita fue entre semana y estuvimos casi solos visitandolo todo.
Subimos el puerto de la Garganta a medio camino hasta Santalla ya en la comarca de los Oscos.
En esta zona "el verde se funde con el negro de las pizarras", "suaves montañas, trocitos de bosque y de pequeños ríos y cascadas", "el hierro y el fuego han encontrado su hogar". Así te lo venden en los panfletos y cuando llegas allí te das cuenta de que es verdad.
Los Oscos fueron los pobladores de la Campaña Italiana que se establecieron por aqui en época de los romanos. Muchas de sus tradiciones todavía perduran en esta comarca aislada durante mucho tiempo de la vida rutinaria.
En 2016 por primera vez la unión de tres pequeños pueblos se llevo el premio de Ejemplar: Santa Eulalia, San Martin y Villanueva lo lograron. Con solo 1300 vecinos en toda la comarca han sido capaces de alzarse con tan preciado galardón por " aunar tradición y modernidad, conservar el patrimonio cultural y natural, en estos tiempos de crisis rural" palabras dichas en la entrega del premio y subrayadas por todos los que visitan la zona.
Una de esas tradiciones es la de los herreros, por eso Santalla esta sembrada de esculturas de hierro, la vaca motera, un ferreiro trabajando, un clavo gigante....
El monumento a Pueblo Ejemplar como no podía ser de otra forma esta hecho en hierro y son tres oscos juntos, uno por cada pueblo.
Después de la foto de rigor y de acuñar el pasaporte damos un paseo por el pueblo. En la Plaza Mayor se encuentra el Ayuntamiento y la iglesia parroquial del s. XVII, con unos bellísimos soportales..
Vemos también el Telar de Irene un taller artesanal que intenta recuperar la tradición tejiendo con materiales naturales.
Comentarios de mucha gente sobre el mesón La Cerca casi nos obligan a acercarnos allí para verlo, y cuanta razon tenian. El sitio una casa típica asturiana, con aperos de labranza, de cocina y utensilios de la vida antigua, un verdadero museo etnográfico con un impresionante hórreo en medio de todos los habitáculos. Y para colofón una inmejorable cocina.
De camino a las motos con el estomago lleno nos encontramos con la fuente lavadero del año 1955, en cuyo interior esta la imagen de Santa Barbara. Estaba especialmente bonita porque estaba llena de hortensias.
Nos dirigimos a nuestro siguiente punto que es Villanueva. En este pequeñísimo pueblo lo que llama la atención es su monasterio, recientemente rehabilitada su fachada y su patio el resto esta en un estado ruinoso.
Entre eso y la música que se oye en la visita, le dan un aire misterioso que hace el corto paseo en inmejorable. Del monasterio destacar un sistema de alcantarillado del siglo XVI descubierto recientemente.
Entre bosques y ríos, con el aire puro y un silencio que envuelve el camino nos dirigimos hasta San Martin. Apenas nos cruzamos con un coche. El pueblo también parece medio desierto. Hace calor y es mediodía.
El pueblo no es muy grande así que nos da tiempo a ver buena parte de su patrimonio. Las casas solariegas, como la de los Guzmanes antiguo Palacio del s. XVIII rehabilitado como Ayuntamiento desde 1990, tiene una bonita puerta de acceso, dentro se aprecian un hórreo, una capilla y la vivienda.
Justo enfrente se encuentra la Iglesia parroquial de San Martin, reedificada en el s.XIX sobre una anterior prerrománica. El edificio construido en mampostería y pizarra esta muy acorde con toda la arquitectura tradicional de la zona.
Y el hórreo de casa Curon que es también un claro exponente de esta, con cubierta de pizarra y paja.
Sellamos en información y turismo y nos dirigimos a Grandas de Salime.
Grandas es la última etapa del Camino Primitivo hacia Santiago en Asturias. Esto y su embalse son sus señas de identidad.
El Camino va desde Oviedo hasta Santiago por el interior. Muy usado en el s. IX quedando despues mas relegado por el camino francés. Sus paisajes son agrestes y de gran belleza pero la ruta es una de las más duras en sus poco más de 300km hay mucha montaña y mucho desnivel. Ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.
Dentro de varias etapas del camino Primitivo se ha creado un proyecto desde 2016 de hacer el camino de los Derechos Humano. El proyecto todavía inacabado consiste en colocar 30 placas de bronce con los 30 artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Estas placas patrocinadas por personas, organizaciones y empresas de todo el mundo y creadas por el artista Eladio de Mora se irán colocando en diversas localizaciones. Hay colocadas alguna más de la mitad.
El embalse, del cual ya he hablado en otras cronicas, esta situado a 4 km del pueblo. Es el más grande de Asturias y su aprovechamiento es hidroeléctrico. Su construcción a mediados del s. XX provoco la llegada a esta zona de miles de trabajadores. Hay varios miradores y os recomiendo parar en alguno de ellos.
Pero son sus iglesias, casonas,el museo etnográfico (uno de los más completos de España), los paisajes protegidos, las antiguas minas de oro, lo que han hecho a Grandas merecedor del premio en 1993.
La Colegiata de San Salvador fue una pequeña iglesia del s.XII a la que posteriormente se le fueron añadiendo la torre, el pórtico y varios elementos más hasta que en el s.XIX quedo tal y como esta ahora.
Ya solo nos quedaba un sello y este estaba en Boal.
Una bella ruta entre álamos, madroños y sobre todo castaños, por donde la luz se abre paso a duras penas y las castañas caen sin parar en el camino nos lleva hasta el Embalse de Doiras.
Entramos a Boal por una avenida, luego sabríamos que la apodan el Paseo Indiano, donde bellas y llamativas casas nos roban la atención.
Villa Anita es a la que se dirigen nuestros ojos. Con toda su fachada y laterales forrados de cerámica, un tejado a dos aguas con influencias americanas, japonesas y medievales destaca en el verde se sus alrededores.
En el Parque de los Emigrantes se muestra la placa del Premio junto a un conjunto escultórico a la Emigración boalesa.
Esta obra se coloco coincidiendo con el centenario de la creación en la Habana de la sociedad de inmigrantes de Boal. Dicha asociación fue muy importante en toda esta zona porque desde su fundación contribuyo a la construcción de escuelas por toda esta comarca.
Con el pasaporte ya completo y todavía era media tarde decidimos hacer noche en Pola de Allande una población algo más grande y que solo se encontraba a 57km.
Lo que no sabíamos era como eran esos 57 km. Una carretera revirada, con curvas de herradura y rampas hasta del 15%.
El primer tramo por la AS-35 era una carretera estrecha con el firme malo, mucha vegetación a los lados y no mucho trafico pero el que había era rápido. los vecinos tienen la casi seguridad de que por esas carreteras no circula casi nadie. Así que con mucha precaución poco a poco para arriba.
Tras los primeros km. nos incorporamos a la AS-364 pero aunque sigue siendo estrecha y con curvas muy cerradas el buen estado del firme nos da otra seguridad. Subidas y bajadas hasta llegar a la cima del puerto de Bustantigo.
Los paisajes son de una belleza sublime y tras superar los 1000m. de desnivel coronamos el puerto de la Marta a 1105m. La verdad es que nos daba la sensación de haber ascendido mucho más. Los ciclistas tienen a este puerto como el más duro de Asturias, cosa que luego hemos sabido.
Los paisajes de una belleza excepcional con un amplio valle a un lado y al frente la increíble sierra del Palo superan todas las expectativas de un bonito puerto.
En la carretera solo ganado porque esta zona es vaqueriza y comenzamos el descenso. Al coger la AS-14 la carretera ya cambia es amplia y sinuosa, atrás quedaron esas curvas imposibles, y tras una larga hora y media llegamos a Pola de Allande.
Allande es tierra de gran riqueza agrícola y ganadera, es naturaleza en estado puro. La mayor parte es Patrimonio Natural. El concejo con 17 parroquias pero solo 3000 habitantes. La capital es Pola. Un pueblo tranquilo y acogedor.
En el destaca la fachada del Ayuntamiento de estilo ecléctico, la iglesia de San Andrés, y el Palacio de Cienfuegos.
En el Parque del Toral se encuentra el monumento al Emigrante que cuenta con replicas exactas en Puerto Rico y Santo Domingo.
Nos alojamos y cenamos en la Nueva Allandesa. El alojamiento sin reseñas especiales pero la comida casera y muy tradicional. Este es uno de esos sitios donde el popular dicho asturiano: "Nada existe excepto los átomos y el espacio vacío. Todo lo demás es cachopo." no se cumple . Hay muchas más cosas.
Nos volvimos a León por una bellísima ruta por el Puerto de Somiedo, pero no os lo voy a contar aquí porque dedicare otra crónico a los bellos puertos astur leoneses.
Muchísimas gracias al Parque Histórico del Navia por promocionar tan estupenda ruta y darme mi diploma de Motera Ejemplar.
Gracias a mis queridos amigos José y Loreto que nos acompañan en nuestras aventuras.
Y como no: gracias a mi motero favorito (ahora tambien Ejemplar) que me lleva y me trae por todos los rincones.
ME ENCANTA VIAJAR Y SI ES MOTO MAAAAS.
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